En este artículo veremos algunas pistas e ideas sobre cómo decorar una casa de playa con estilo, pero también teniendo en cuenta las necesidades de quienes quieren limitar su presupuesto.
La casa de la playa, como cualquier entorno en el que pasamos unas vacaciones, debe ser estéticamente agradable y transmitir una sensación de relajación. Al mismo tiempo, cuando vayamos a amueblarlo, no debemos olvidar que también debe ser práctico, así como funcional para las actividades diarias y los momentos de descanso.
A diferencia de la casa de la ciudad, en la de la playa vivimos durante periodos mucho más cortos, por lo que podemos permitirnos un mayor rango expresivo de nuestra creatividad, experimentando con soluciones que van más allá de las tendencias del momento.
En este artículo te daremos algunos consejos e ideas para crear un ambiente perfecto al estilo de las vacaciones.
Veamos ahora qué es mejor evitar en una casa de playa.
Cómo NO decorar una casa de playa
El gusto es el gusto, pero estamos aquí para dar consejos y no para caer en los tópicos de la cursilería. Así que, para no cansarnos fácilmente de nuestro entorno en las habitaciones de una casa de playa, lo mejor es evitar el estilo marinero.
Sin duda podemos prescindir de los adornos con anclas, cuerdas y timones aquí y allá. Quizá también debamos evitar las rayas azules y blancas, que a la larga cansan, y, sobre todo, tener cuidado con ponerlas en las paredes, ya que no hacen más que hacer que un barco parezca un coche.
Recordemos que hay que evitar las formas demasiado cuadradas y tratar de centrarse en perfiles más suaves y acogedores.
Así que veamos a continuación cómo podemos personalizar el interior de una casa de playa y hacerla práctica, funcional y acogedora.
Los colores para una casa de playa
Para simplificar el proceso de creación de una casa de playa, empezamos por la elección de los colores, que deben ser frescos, relajantes y recordar el contexto ambiental, es decir, el mar y la vegetación.
De ahí que se dé espacio a los tonos que van desde la cerceta hasta el azul, pasando por el turquesa y el azul claro, tonos que transmiten calma y tranquilidad. Para completar el conjunto, combinamos estos colores con el blanco, el marfil y el amarillo claro, que transmiten frescura, luz y orden.
Para las paredes interiores y los suelos de las casas de playa, lo mejor es optar por tonos muy claros, de modo que podamos tener más margen creativo a la hora de elegir los muebles y la decoración. Además, recuerde que la casa de la playa debe transmitir una sensación de frescura, mientras que la luminosidad afecta positivamente al estado de ánimo y promueve la relajación en las vacaciones.
Muebles para una casa de playa
Como hemos dicho antes, se prefieren los muebles de líneas suaves, sencillas y básicas.
La madera natural siempre es buena, pero los elementos de mobiliario lacados en tonos pastel también pueden ayudar a que la habitación sea acogedora y esté en consonancia con el estilo de las vacaciones.
El mimbre y otros componentes de fibra natural son también muy recomendables.
Además, recuerda que una casa de playa es para vivirla durante periodos cortos, por lo que no tiene sentido llenarla de muebles voluminosos como armarios de 4 estaciones o armarios de gran tamaño.
Es mejor dejar espacio para las zonas comunes: sofás grandes y mullidos y una zona de comedor que pueda acoger a una compañía más numerosa, para disfrutar de veladas despreocupadas y de convivencia.
Telas para amueblar la casa de la playa
Para los tejidos relativos a cojines, cortinas, sofás y camas, nos centramos en fibras naturales como el lino y el algodón. Tal vez, por practicidad, prefiramos soluciones fácilmente lavables, como las fundas de cojín con cremallera.
En cuanto a los colores, tratamos de elegir tonos neutros con matices cercanos al color de la arena, quizás combinados con colores que recuerdan al mar: verde esmeralda, verde océano, azul turquesa, etc.
Decoración de una casa en la playa
Anteriormente hemos indicado como estilo decorativo a evitar todas aquellas referencias a la «vida a bordo» marinera (anclas, salvavidas, redes de pesca, etc.). Veamos a continuación qué objetos podemos poner en nuestra casa de la playa para hacerla acogedora, funcional y confortable, así como para crear un ambiente armonioso en forma y color.
Si queremos mantener un estilo rústico-costero, podemos elegir artículos de fibras naturales o que recuerden a la flora y fauna marina (corales, estrellas de mar, algas, etc.). Hay reproducciones de muy alta calidad, por lo que no es necesario perturbar el ecosistema para exhibir trofeos de dudoso gusto.
En las paredes, podemos colocar cuadros de temática de paisaje marino, quizá realizados con acuarelas y, por tanto, muy evocadores.
Mientras que, para las lámparas, optamos por objetos de vidrio en tonos azules y esmeralda (la transparencia y el color recuerdan al agua del mar).
Conclusiones
En este artículo nos hemos centrado en cómo decorar una casa de playa, sin embargo, nadie nos impide utilizar las mismas ideas de estilo para nuestra casa de la ciudad también. Siguiendo los ejemplos vistos anteriormente, podemos conseguir ambientes armoniosos y acogedores que se integran perfectamente en cualquier contexto.
Además, si se observa con detenimiento, no es necesario comprometer grandes sumas de dinero para conseguir un ambiente funcional y de buen gusto; de hecho, en los ejemplos mostrados, es evidente cómo es posible decorar una casa de playa por poco dinero.